Resumen
En el debate en curso sobre la “salud” del feminismo, algunos autores acusan a las(os) feministas de la “segunda ola”, especialmente a las(os) “feministas de la diferencia”, de haber debilitado los reclamos feministas al abandonar la inspiración emancipadora de la “primera ola”. Las(os) feministas de la “segunda ola” también son acusadas(os) de ignorar la importancia del derecho. Sin embargo, si se profundiza en ello, su perspectiva sobre el derecho parece representar uno de sus más importantes legados. Abandonarlo en favor de un entusiasmo acrítico por la corriente principal liberal de género o una “política de identidad” de género sería un error. Las(os) feministas de hoy en día deberían trabajar para adaptar este legado a los desafíos contemporáneos.